En las reuniones comunitarias convocadas por Kuskakua Unsti, como parte del Movimiento y el Proyecto Pireri, se acordó presentar una queja ante la Comisión de Derechos Humanos. El documento fue respaldado por sellos y firmas de las autoridades civiles y comunales de todas las comunidades en donde se realizaron las reuniones. En la queja se deja claro que el pueblo p’urhépecha no había sido debidamente informado, ni consultado para que la pirekua ingresara en la Lista Representativa de Patrimonio Cultural Inmaterial de la UNESCO. También se expuso la preocupación de que fuera tratada por las instituciones gubernamentales, especialmente la Secretaría de Turismo, como un objeto turístico ya que la pirekua y la música, es una forma de vida y fuente de identidad para el pueblo p’urhépecha. También se exigió la consulta a las comunidades, en un ambiente pacífico y de diálogo, informando previamente para tener una participación efectiva de éstas.
La queja fue recibida por la Comisión de Derechos Humanos del estado de Michoacán el 16 de noviembre del 2011. Posteriormente la queja fue turnada a la Comisión Nacional de Derechos Humanos en el Expediente CNDH/4/2011/9959/Q. La queja se turnó de la Comisión estatal a la Nacional porque en la postulación de la pirekua intervinieron instituciones federales como el INAH.
El 28 de junio de 2012 se estableció una Mesa de Diálogo en la ciudad de Morelia participando la CNDH, el Gobierno de Michoacán y el INAH e integrantes del pueblo p’urhépecha que habían respaldado la queja. Es importante subrayar que para esta Mesa, se convocó a los “quejosos”, con dos días de anticipación y sin mencionar el objetivo de la reunión. Por ello los músicos, compositores y pireris de las comunidades p’urhépecha no tuvieron el suficiente tiempo para informarse de tal evento, ni conocían los puntos a tratar, para tomar acuerdos colectivos previamente.
En esta Mesa de Diálogo se decidió lo siguiente:
a) Elaborar un Adendum al expediente de la pirekua enviado a la UNESCO. La directora del INAH-Michoacán, la Dra. Lizbeth Aguilera, se comprometió a elaborarlo y enviarlo a la Dirección de Patrimonio Mundial del INAH en la ciudad de México. Este Adendum tiene como finalidad garantizar el respeto de los derechos del Pueblo P’urhépecha y la participación en cualquier aspecto relacionado con la pirekua especialmente con la elaboración del Plan de Salvaguarda.
b) Instruir a todas las instituciones gubernamentales de que es respeten los derechos del pueblo p’urhépecha.
c) Que el INAH realizara las visitas necesarias a las comunidades p’urhépecha para recabar propuestas y necesidades de éstas para elaborar el proyecto de salvaguarda, informando de sus gestiones a la CNDH.
d) El INAH-Michoacán se comprometió a que en 2 meses y medio, posteriores a esa Mesa de Diálogo, integraría el proyecto, con la información y documentación necesaria del Adendum y someterlo a consideración de la Dirección de Patrimonio Mundial del INAH.
e) El Gobierno del estado de Michoacán se comprometió a informar a la CNDH por escrito del seguimiento de los procesos relacionados con la declaratoria de la pirekua.
En esta reunión, al decidirse lo anterior y darse, supuestamente, un proceso de conciliación con los quejosos, la delegada de la CNDH consideró que los derechos violentados ya habían sido resarcidos, situación con la cual los integrantes del movimiento pireri no estaban de acuerdo. Así de esta forma unilateral la CNDH cerró el expediente de queja ante esa Comisión iniciado por la inconformidad del pueblo p’urhépecha.
Hasta la fecha, ni el INAH-Michoacán ni la Dirección de Patrimonio Mundial del mismo INAH, han cumplido con estos acuerdos. No existe una respuesta institucional sobre el Adendum, ni sobre el proceso de consulta e información sobre la declaratoria y la elaboración del Plan de Salvaguarda entre instituciones, músicos, compositores y pireris p’urhépecha.